Una correcta puesta a punto y que estés conforme con el manejo del coche antes de cada carrera es vital. No tiene sentido tener el bólido más rápido de la pista si su comportamiento es imprevisible. Es más importante tener un coche con el que te sientas cómodo. La única manera de conseguirlo es tomarte tiempo para practicar antes de las carreras. Todas las pistas de la serie IndyCar™ son ovales, lo que puede inducir a pensar que en todas se conduce igual, ¿no? Pues no. Son completamente distintas. Tienes que poner a punto el coche para cada carrera si te tomas en serio la competición al más alto nivel. Dummy8 podrías rodar con menor adherencia para ir más rápido en las rectas, pero tendrías que reducir mucho en las curvas, así que, en general, es mejor tomar las curvas más rápido en detrimento de un poco de velocidad en las rectas. ¿Qué es la adherencia aerodinámica? Básicamente, es lo que ayuda al coche a pegarse al suelo a gran velocidad; se produce mientras el coche atraviesa el aire. La forma aerodinámica del coche y el ajuste de los alerones delantero y trasero son factores decisivos para determinar la fuerza descendente que se produce. El proceso funciona de forma parecida a las alas de un avión, pero, en lugar de producir fuerza de elevación, se produce fuerza hacia abajo. De vuelta en el taller, puedes aumentar y disminuir la fuerza descendente ajustando el ángulo de los alerones delanteros y traseros. Pero sé consciente de que, en algunas pistas, hay restricciones sobre el ángulo de alerón, de modo que tienes que mantenerte dentro de esos límites. Y recuerda que, aunque la fuerza descendente ayuda a mantener la adherencia, tiene como consecuencia la resistencia, que reduce la velocidad. De nuevo, es un equilibrio y la única manera de conseguirlo es practicar y hacer ajustes antes de la carrera. Tu equipo de boxes también puede ajustar el alerón delantero en las paradas, pero, al igual que el estabilizador, solo debe hacerse para poner a punto el manejo del coche, ya que se deteriora durante la carrera. Otra buena razón para hacer una correcta puesta a punto son los neumáticos. Los neumáticos son la parte más importante del coche, por lo que debes asegurarte de que duran lo máximo. No hay nada peor que desgastarlos demasiado rápido y luchar con la dirección del coche hasta la siguiente parada. Para sacar el máximo rendimiento a los neumáticos, la temperatura de su superficie ha de ser uniforme. Esto significa que toda la superficie está entrando en contacto con la pista y que la presión sobre el neumático y el desgaste es uniforme, lo que te proporciona una conducción mucho más controlable y predecible. La mejor forma de probar la temperatura de los neumáticos es dar unas cuantas vueltas de prueba e ir al taller. Así verás las lecturas de temperatura de todos los neumáticos. Después, utilízalas para decidir la puesta a punto. Por ejemplo, si el lado izquierdo está más caliente que el derecho, deberías ajustar la curvatura o ángulo de la rueda con respecto a la pista. Se usa para ayudar a mantener un contacto uniforme entre la superficie del neumático y la carretera. Es el primer paso para mantener constante la temperatura en toda su superficie. Echa un vistazo a este ejemplo. Para equilibrar la temperatura en este neumático, necesitamos añadir más curvatura positiva. Así, si el lado derecho del neumático está más caliente que el izquierdo, tendremos que añadir más curvatura negativa. Sabrás que la curvatura es correcta cuando la lectura de la temperatura del neumático sea simétrica. Sin embargo, podrías no tener una temperatura igualada. En ese caso, puede que necesites ajustar la presión del neumático. Si los bordes del neumático están más calientes que el centro, es que el neumático está 'combado', lo que significa que la presión del aire es demasiado baja, así que añade más presión. Asimismo, si la temperatura del centro es superior a la de los bordes, es que el neumático está 'abombado', demasiado inflado, así que tienes que reducir la presión. Y por último, la temperatura general de los neumáticos. Cuanto más calientes estén, más adherencia conseguirás. Lo malo es que se desgastan antes. Claro que también puedes rodar con los neumáticos más fríos para alargar su vida, pero no agarrarán tanto. Otra vez es un frágil equilibrio y una preferencia en función de tu estilo de conducción y tu estrategia de paradas. Dummy51 Este coche ha sido preparado para conseguir un tiempo de vuelta más lento de lo normal. Da un par de vueltas de prueba y después ve al taller. Tienes que averiguar qué le ocurre y mejorar la puesta a punto para poder batir el tiempo de vuelta. No voy a decirte lo que debes hacer; debes averiguarlo tú solo. Lo único que te diré es que es mejor hacer solo unos cuantos ajustes cada vez. No te aturulles y cambies todo a la vez, porque entonces será difícil saber qué ajuste afecta a qué. Cuando creas que estás listo, saca el coche a la pista. Si bates el peor tiempo de vuelta, pasas la prueba. ¡Chupado! Tres, dos, uno, ¡YA! Una actuación como esa no te lleva a ninguna parte. Persevera, ¡lo conseguirás! Estuvo cerca, pero no eres lo bastante rápido. Solo lo has batido, eso es un bronce. Buen tiempo. Eso es medalla de plata. Excelente actuación, lo has preparado muy bien. ¡Medalla de oro! Por ejemplo, ¿sabías que hay tipos distintos de alerones delanteros y traseros para el coche? Están los alerones de baja adherencia aerodinámica para competir en supercircuitos de velocidad y los de gran adherencia aerodinámica para los óvalos cortos. En un supercircuito de velocidad, los coches van rápido y demasiada adherencia es un inconveniente, mientras que en los óvalos cortos, necesitas mayor agarre para tomar más rápido las curvas. Es un delicado equilibrio: